LA GRAN RAMERA

La prostitución en nuestro país ha alcanzado tan grandes proporciones que muchachas muy jóvenes tienen avisos como "masajistas" en los periódicos, su oficina es la calle y su misma casa,  ante los ojos de sus padres reciben llamadas de sus "amigos", debido al avance tecnológico del teléfono celular, mas, nosotros sabemos que su trabajo es la prostitución y la pornografía.

Esto, quizás, ha influenciado a los matrimonios para que busquen placer sexual fuera antes que en el lecho conyugal.

La infidelidad conyugal no es nueva porque el desempleo, la pobreza y el hambre lleve a la prostitución y que mujeres y hombres vendan sus cuerpos. No. La Biblia registra ese pecado como el más horrendo ante la presencia de Dios.

Hagamos un breve estudio con la ayuda del espíritu de profecía en Ellen White. Ella escribe:

"La infidelidad a Cristo de que la iglesia se hizo culpable al dejar enfriarse la confianza y el amor que a él le unieran, y al permitir que el apego a las cosas mundanas llenase su alma, es comparada a la violación del voto matrimonial. El pecado que Israel cometió al apartarse del Señor está representado bajo esta figura; y el amor maravilloso de Dios que ese pueblo despreció, está descrito de modo conmovedor: “Te di juramento y entré en pacto contigo, dice Jehová el Señor; y viniste a ser mía”. “Y fuiste sumamente hermosa, y prosperaste hasta llegar a dignidad real. Y salió tu renombre entre las naciones, en atención a tu hermosura, la cual era perfecta, a causa de mis adornos que yo había puesto sobre ti [...]. Mas pusiste tu confianza en tu hermosura, y te prostituiste a causa de tu renombre”. “Así como una mujer es desleal a su marido, así vosotros habéis sido desleales para conmigo, oh casa de Israel, dice Jehová”. “¡Ah, mujer adúltera, que en vez de tu marido admites los extraños!” Ezequiel 16:8, 13-15, 32; Jeremías 3:20 (VM).

"En el Nuevo Testamento se hace uso de un lenguaje muy parecido para con los cristianos profesos que buscan la amistad del mundo más que el favor de Dios. El apóstol Santiago dice: “¡Almas adúlteras! ¿no sabéis acaso que la amistad del mundo es enemistad contra Dios? Aquel pues que quisiere ser amigo del mundo, se hace enemigo de Dios”. Santiago 4:4 (VM).

"La mujer Babilonia de Apocalipsis 17 está descrita como “vestida de púrpura y escarlata, y adornada de oro y piedras preciosas y perlas, teniendo en su mano un cáliz de oro, lleno de abominaciones, es decir, las inmundicias de sus fornicaciones; y en su frente tenía un nombre escrito: Misterio: Babilonia la grande, madre de las rameras”. El profeta dice: “Vi a aquella mujer embriagada de la sangre de los santos, y de la sangre de los mártires de Jesús”. Se declara además que Babilonia “es aquella gran ciudad, la cual tiene el imperio sobre los reyes de la tierra”. Apocalipsis 17:4-6, 18 (VM). La potencia que por tantos siglos dominó con despotismo sobre los monarcas de la cristiandad, es Roma. La púrpura y la escarlata, el oro y las piedras preciosas y las perlas describen como a lo vivo la magnificencia y la pompa más que reales de que hacía gala la arrogante sede romana. Y de ninguna otra potencia se podría decir con más propiedad que estaba “embriagada de la sangre de los santos” que de aquella iglesia que ha perseguido tan cruelmente a los discípulos de Cristo. Se acusa además a Babilonia de haber tenido relaciones ilícitas con “los reyes de la tierra”.

"Por su alejamiento del Señor y su alianza con los paganos la iglesia judía se transformó en ramera; Roma se corrompió de igual manera al buscar el apoyo de los poderes mundanos, y por consiguiente recibe la misma condenación.

"Se dice que Babilonia es “madre de las rameras”. Sus hijas deben simbolizar las iglesias que se atienen a sus doctrinas y tradiciones, y siguen su ejemplo sacrificando la verdad y la aprobación de Dios, para formar alianza ilícita con el mundo. El mensaje deApocalipsis 14, que anuncia la caída de Babilonia, debe aplicarse a comunidades religiosas que un tiempo fueron puras y luego se han corrompido. En vista de que este mensaje sigue al aviso del juicio, debe ser proclamado en los últimos días, y no puede por consiguiente referirse solo a la iglesia romana, pues dicha iglesia está en condición caída desde hace muchos siglos. Además, en el capítulo 18 del Apocalipsis se exhorta al pueblo de Dios a que salga de Babilonia. Según este pasaje de la Escritura, muchos del pueblo de Dios deben estar aún en Babilonia. ¿Y en qué comunidades religiosas se encuentra actualmente la mayoría de los discípulos de Cristo? Sin duda alguna, en las varias iglesias que profesan la fe protestante. Al nacer, esas iglesias se decidieron noblemente por Dios y la verdad, y la bendición divina las acompañó. Aun el mundo incrédulo se vio obligado a reconocer los felices resultados de la aceptación de los principios del evangelio. Se les aplican las palabras del profeta a Israel: “Salió tu renombre entre las naciones, en atención a tu hermosura, la cual era perfecta, a causa de mis adornos, que yo había puesto sobre ti, dice Jehová el Señor”. Pero esas iglesias cayeron víctimas del mismo deseo que causó la maldición y la ruina de Israel: el deseo de imitar las prácticas de los impíos y de buscar su amistad. “Pusiste tu confianza en tu hermosura, y te prostituiste a causa de tu renombre”.Ezequiel 16:14, 15 (VM).

"Muchas de las iglesias protestantes están siguiendo el ejemplo de Roma, y se unen inicuamente con “los reyes de la tierra”. Así obran las iglesias del estado en sus relaciones con los gobiernos seculares, y otras denominaciones en su afán de captarse el favor del mundo. Y la expresión “Babilonia”—confusión—puede aplicarse acertadamente a esas congregaciones que, aunque declaran todas que sus doctrinas derivan de la Biblia, están sin embargo divididas en un sinnúmero de sectas, con credos y teorías muy opuestos.

"Además de la unión pecaminosa con el mundo, las iglesias que se separaron de Roma presentan otras características de esta.

"Una obra católica romana arguye que “si la iglesia romana fue alguna vez culpable de idolatría con respecto a los santos, su hija, la iglesia anglicana, es igualmente culpable, pues tiene diez iglesias dedicadas a María por una dedicada a Cristo”. Dr. Challoner, The Catholic Christian Instructed, prólogo, 21, 22.

"Y el Dr. Hopkins, en un “Tratado sobre el milenio”, declara: “No hay razón para creer que el espíritu y las prácticas anticristianas se limiten a lo que se llama actualmente la iglesia romana. Las iglesias protestantes tienen en sí mucho del Anticristo, y distan mucho de haberse reformado enteramente de [...] las corrupciones e impiedades”. Samuel Hopkins, Works 2:328.

"Respecto a la separación entre la iglesia presbiteriana y la de Roma, el doctor Guthrie escribe: “Hace trescientos años que nuestra iglesia, con una Biblia abierta en su bandera y el lema ‘Escudriñad las Escrituras’ en su rollo de pergamino, salió de las puertas de Roma”. Luego hace la significativa pregunta: “¿Salió del todo de Babilonia?” Thomas Guthrie, The Gospel in Ezekiel, 237.

“La iglesia de Inglaterra—dice Spurgeon—parece estar completamente roída por la doctrina de que la salvación se encuentra en los sacramentos; pero los disidentes parecen estar tan hondamente contaminados por la incredulidad filosófica. Aquellos de quienes esperábamos mejores cosas están apartándose unos tras otros de los fundamentos de la fe. Creo que el mismo corazón de Inglaterra está completamente carcomido por una incredulidad fatal que hasta se atreve a subir al púlpito y llamarse cristiana”.

"¿Cuál fue el origen de la gran apostasía? ¿Cómo empezó a apartarse la iglesia de la sencillez del evangelio? Conformándose a las prácticas del paganismo para facilitar a los paganos la aceptación del cristianismo. El apóstol Pablo dijo acerca de su propio tiempo: “Ya está obrando el misterio de iniquidad”. 2 Tesalonicenses 2:7.

"Mientras aún vivían los apóstoles, la iglesia permaneció relativamente pura. “Pero hacia fines del siglo segundo, la mayoría de las iglesias asumieron una forma nueva; la sencillez primitiva desapareció, e insensiblemente, a medida que los antiguos discípulos bajaban a la tumba, sus hijos, en unión con nuevos convertidos, [...] se adelantaron y dieron nueva forma a la causa” (Robert Robinson, Ecclesiastical Researches, capítulo 6, p. 51). Para aumentar el número de los convertidos, se rebajó el alto nivel de la fe cristiana, y el resultado fue que “una ola de paganismo anegó la iglesia, trayendo consigo sus costumbres, sus prácticas y sus ídolos”. Gavazzi, Lectures, 278. Una vez que la religión cristiana hubo ganado el favor y el apoyo de los legisladores seculares, fue aceptada nominalmente por multitudes; pero mientras estas eran cristianas en apariencia, muchos “permanecieron en el fondo paganos que seguían adorando sus ídolos en secreto” (ibíd.).

"¿No ha sucedido otro tanto en casi todas las iglesias que se llaman protestantes? Cuando murieron sus fundadores, que poseían el verdadero espíritu de reforma, sus descendientes se adelantaron y “dieron nueva forma a la causa”. Mientras se atenían ciegamente al credo de sus padres y se negaban a aceptar cualquiera verdad que fuese más allá de lo que veían, los hijos de los reformadores se alejaron mucho de su ejemplo de humildad, de abnegación y de renunciación al mundo. Así “la simplicidad primitiva desaparece”. Una ola de mundanalidad invade la iglesia “trayendo consigo sus costumbres, sus prácticas y sus ídolos”.

"¡Ay, hasta qué grado esa amistad del mundo, que es “enemistad contra Dios”, es fomentada actualmente entre los que profesan ser discípulos de Cristo! ¡Cuánto no se han alejado las iglesias nacionales de toda la cristiandad del modelo bíblico de humildad, abnegación, sencillez y piedad! Juan Wesley decía, al hablar del buen uso del dinero: “No malgastéis nada de tan precioso talento, tan solo por agradar a los ojos con superfluos y costosos atavíos o con adornos innecesarios. No gastéis parte de él adornando prolijamente vuestras casas con muebles inútiles y costosos, con cuadros costosos, pinturas y dorados [...]. No gastéis nada para satisfacer la soberbia de la vida, ni para obtener la admiración de los hombres [...]. ‘Siempre que te halagues a ti mismo, los hombres hablarán bien de ti’. Siempre que te vistas ‘de púrpura y de lino fino blanco, y tengas banquetes espléndidos todos los días, ‘no faltará quien aplauda tu elegancia, tu buen gusto, tu generosidad y tu rumbosa hospitalidad. Pero no vayas a pagar tan caros sus aplausos. Conténtate más bien con el honor que viene de Dios” (Wesley, Works, sermón 50, sobre el uso de dinero). El Conflicto de los siglos. P 380


Salir de Babilonia es salir de las costumbres del mundo



¿QUÉ AFIRMA APOCALIPSIS 13: 14-18 RESPECTO A LA "BESTIA" QUE COLOCARÁ UNA MARCA EN LA MANO DERECHA O EN LA FRENTE Y QUE POR LA CUAL NADIE PODRÁ COMPRAR NI VENDER?



     "Engaña a los habitantes de la tierra con las señales que se le ha permitido hacer en presencia de la bestia, diciendo a los habitantes de la tierra que le hagan una imagen a la bestia que fue herida de espada y revivió. Se le permitió infundir aliento a la imagen de la bestia, para que la imagen hablara e hiciera matar a todo el que no la adorara.  Y hacía que a todos, pequeños y grandes, ricos y pobres, libres y esclavos, se les pusiera una marca en la mano derecha o en la frente, y que ninguno pudiera comprar ni vender, sino el que tuviera la marca o el nombre de la bestia o el número de su nombre.
     "Aquí hay sabiduría. El que tiene entendimiento cuente el número de la bestia, pues es número de hombre. Y su número es seiscientos sesenta y seis".

¿COMPRAR NI VENDER?

VEAMOS LO QUE DICE EL SIGUIENTE VIDEO 

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